jueves, 2 de octubre de 2014

Las cosas relacionadas

La vida, para un gran grupo de personas, es realmente amplia. Yo tengo la suerte de que mi vida, hasta este punto, ha sido realmente plena y me la he pasado muy bien, si voy sumando recuerdos y recuerdos. La vida es, como yo la interpreto, también un conjunto grande de casualidades que nos llevan a tomar diversas decisiones, las cuales nos van definiendo ampliamente. Por otra parte, debo decir que yo realmente he ido cambiando de forma constante hasta el punto de llegar a ser quien soy ahora: un ser de 17 años que goza de buena otrografía, que adora la filosofía y que siempre estoy dispuesto a aprender algo más de lo que sé, claro que a veces no parezco dispuesto, como cualquier persona. Hace un par de años me dio mi (según yo lo llamo) "primer enamoramiento", típico de la edad: lleno de ilusiones tontas y un poco de desesperación. Un día, mientras pasaba por tales sentimientos, vi una película que la chica de la cual sentía yo algo me había recomendado cuando nos hablábamos aún (así es, nos dejamos de hablar luego de contarle mis sentimientos). La película era un símbolo hipster de los más grandes: "500 days of Summer". La primera vez que la vi, tengo que admitirlo con un poco de vergüenza, lloré con algunos diálogos. La segunda vez, me identifiqué; a la quinta, me comencé a dar cuenta que había una canción de la cinta era muy atractiva: Era "Bookends" de Simon & Garfunkel, banda que se estaba convirtiendo (desde un poco tiempo antes) en mi favorita, por sus éxitos radiales: "Mrs. Robinson" y "The sound of silence". También por esa película me comenzó a gustar el trabajo (increíble, por cierto) de René Magritte. Pero lo más curioso es que a la par de eso, dentro de la filosofía, me estaba metiendo un poco en el desarrollo de Michel Foucault. Y así me fui desarrollando filosófica y sentimentalmente (empecé a superar a la chica), hasta que descubrí que había un filósofo que hablaba sobre un pintor en un libro entero. El filósofo era mi filósofo favorito y el pintor era mi filósofo favorito. Era Foucault que hablaba sobre Magritte en "Esto no es una pipa" (nombre basado en la homónima pintura de Magritte), explicando en la obra misma por qué no era una pipa. Me sorprendí gratamente, encontré el libro y lo leí en cuatro horas (sí, ya lo conté en una entrada previa con más detalles. Y próximamente descubrí que Paul Simon había hecho, aunque ya en solitario, una canción sobre una foto en la que salía con su esposa y creo que también con su perro. En fin, las relaciones comenzaron a asombrarme, pues si hay cosas que me encantan en el mundo, es que éstas se relacionen, no sé por qué, es como ser un investigador despistado y sin casos que resolver que sabe que con su vida se puede dar cuenta de muchas cosas. Y bueno, la idea de crear esta entrada nació gracias a que el otro día estaba averiguando sobre el "biopoder" que postula Foucault y encontré una tesis que había hecho un hombre para terminar su maestría de filosofía en una universidad colombiana, en ella decía que Foucault era el Magritte de la filosofía: me quedé con cara de sorprendimiento y comencé a leer.

Así que podría decirse que estoy definido por mi amor a la sabiduría y además por una película pseudo-indie del 2009 que vi por primera vez en 2012. Eso ha sido todo por hoy, amigos míos, nos leemos próximamente. Hasta luego, compañeros míos. Suerte en todo y cuidado con las peligrosas relaciones que pueden aparecer en sus vidas. Nos vemos. 

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